Todo runner teme, en algún momento, padecer el “pie de atleta” una patología muy molesta que popularmente se asocia a los temidos hongos.
Para saber exactamente qué es esta dolencia y cómo prevenirla acudimos a los conocimientos de la podóloga de Mendoza Corre, Cecilia Fernández (*).
Con su habitual didáctica, como buena docente y runner que es, nos concedió una productiva entrevista que te recomendamos leas al detalle así aprenderás todo lo referido a esta enfermedad y, lo más importante, cómo prevenirla.
–¿Qué es el pie de atleta?
– Es un término que engloba todas aquellas infecciones que aparecen afectando el pie en situaciones de maceración y oclusión. Deriva de que clásicamente se ha considerado que sucedía en deportistas, pues usaban calzado poco transpirable durante horas y experimentaban hiperhidrosis o hipersudoración por el ejercicio. Estas infecciones pueden ser micóticas y/o bacterianas. Sin embargo, el pie de atleta muchas veces es considerado sinónimo de la tiña pedis, la cual es solamente la infección por hongos. Este error se debe a que la mayoría (90%) de las infecciones en los pies, determinadas por oclusión y maceración, son micóticas.
–Entonces, ¿qué es la tiña pedís?
– Es la causa más frecuente del pie de atleta. Se trata de una infección por hongos dermatofitos cuya preferencia alimenticia es la queratina de la piel, pelos y uñas.
Estos hongos dermatofitos, a su vez, se clasifican de acuerdo al reservorio natural en antropofilicos, zoofilicos o geoglificos. Esto nos importa especialmente porque, por un lado, nos dirá cómo es la transmisión con el objetivo de cortarla y, por el otro, la clínica de la infección (inflamación, vesículas, pústulas).
Un porcentaje muy pequeño de estas infecciones puede darse por cándidas, que son una levadura.
–¿Cuáles son los factores que nos predisponen al pie de atleta?
– Maceración, humedad, hiperhidrosis, oclusión (calzado no transpirable), lesiones en la piel, inmunodeficiencias, dermatosis locales (como la psoriasis), alteraciones metabólicas.
–¿Cómo puede contagiarse el pie de atleta?
– La infección puede adquirirse de forma indirecta al caminar descalzo por vestuarios, gimnasios o instalaciones públicas por contacto con escamas infectadas. También al entrar en contacto con utensilios contaminados (duchas, piscinas, toallas, calzado, etc.)
– ¿Cómo podemos distinguir las diferentes lesiones?
– Podemos distinguir cuatro formas clínicas básicas que nos orientará y nos indicará que debemos recurrir a un profesional:
- Forma interdigital: es la más frecuente. Se caracteriza por eritema y descamación interdigital, acompañada a menudo de maceración y fisuración del fondo del pliegue.
- Forma en calcetín: caracterizada por una hiperqueratosis difusa con eritema, descamación y, a veces, fisuración. Afecta a una o ambas plantas, bordes laterales y talones. En ocasiones se extiende al dorso de los pies adoptando una forma de “soquete deportivo”.
- Forma aguda vesículo-ampollosa: en general es unilateral y se caracteriza por la presencia de vesículas y/o ampollas de contenido claro, muy pruriginosas, agrupadas sobre una base eritematosa en la planta de los pies y, a veces, también el empeine que cuando se rompen presentan erosiones con borde anular desflecado.
- Forma ulcerativa: se presenta como una exacerbación de una tinea pedis interdigital en forma de erosiones y úlceras en los espacios interdigitales. Se observa en pacientes inmunodeprimidos y diabéticos.
–¿Pueden derivar en algo más grave?
– Definitivamente sí. Dependiendo de la cantidad de microorganismos presentes, de las condiciones del huésped, del nivel de patogenicidad del hongo, de la sinergia con otros microorganismos como bacterias, etc.
Todas las formas clínicas pueden asociarse a complicaciones como la sobreinfección bacteriana, el desarrollo de reacción dermatofitica a distancia (en las manos, por ejemplo), celulitis (especialmente en pacientes con insuficiencia venosa y edema crónico) u osteomielitis (que puede requerir la amputación en pacientes diabéticos).
–¿Cuándo debe concurrir al profesional?
– Apenas se observe o sospeche de presentar alguna de las características mencionadas. Ya que con profilaxis y el tratamiento farmacológico apropiado se resuelven relativamente rápido.
Tips
- Evitar medias «no transpirables».
- No usar talco en la zapatilla de manera excesiva.
- Usar calzado transpirable y cambiarlo inmediatamente después de la actividad física.
- Lavar los pies con jabón neutro.
- Secar muy bien los pies luego de la ducha y antes de colocarse las medias.
- Ventilar el calzado.
- Desinfectar el calzado continuamente.
- Aplicar cremas humectantes si la piel es descamativa.
(*) Cecilia Fernández es podóloga con título universitario (matrícula 309). Entre sus principales antecedentes, es docente de la cátedra de «Ortopodología» de la Universidad Maza, donde también estuvo a cargo de la cátedra «Podología Deportiva”. En su currículum también figura ser docente de «Prácticas Profesionalizantes» del I.E.S. 9021 y ser actualmente la responsable del consultorio Podología Integral Cuyo sito en San Juan de Dios 140, esquina Florida, de Dorrego.
Foto de tapa: gentileza Nico Lancellotti (NL Fotos)
Facebook: Fan Page Mendoza Corre (clikc acá para acceder)
Twitter: @mendozacorreok (click acá para acceder)
YouTube: Mendoza Corre (click acá para acceder)
Instagram: @mendozacorreok (click acá para acceder)