La odontóloga (matrícula 3529) Luciana Camenforte advierte que los geles son potencialmente dañinos para la dentadura por lo que, subraya, es necesario tomar medidas preventivas.
“Los geles energéticos y productos azucarados son una herramienta clave en la nutrición deportiva ya que proporcionan una fuente rápida de energía durante el ejercicio. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta cómo pueden afectar la salud dental debido a su contenido de azúcares y ácidos”, señala la también runner.
La corredora de Alto Running destaca que “los azúcares presentes en estos productos alimentan las bacterias presentes en la boca, lo que a su vez producen ácidos que atacan el esmalte dental ya que lo erosionan y desgastan. De esta manera, en los dientes aumentan la sensibilidad y quedan vulnerables a la caries”.
Pero no todo queda ahí ya que -subraya “Lu”- todo este proceso “también puede favorecer a la aparición de enfermedad gingivoperiodontal, como gingivitis o periodontitis”.
Cómo cuidarse
Ahora bien, ante este panorama, ¿tenemos que dejar los geles? Camenforte dice que no, pero remarca que hay que tomar medidas preventivas y nos da algunos tips:
- Hidratarse adecuadamente. Beber agua antes, durante y después del consumo de geles energéticos ayudará a eliminar los residuos de azúcar y ácidos de la boca.
- Limita la frecuencia de uso. Es importante consumir geles solamente cuando sea necesario.
- Enjuague bucal. Después de consumir un gel energético, enjuagá tu boca con agua o enjuagues bucales sin alcohol para eliminar el exceso de azúcar y ácido.
- Mantener una buena higiene dental. Cepillá tus dientes al menos dos veces al día, utilizá hilo dental diariamente y visitá regularmente al dentista.
- Evitar cepillar los dientes inmediatamente después del consumo. Hacerlo apenas terminás de tomar un gel puede causar más daño que beneficio, ya que el esmalte se debilita temporalmente por la acción de los ácidos. Esperá al menos 30 minutos antes de cepillarte los dientes, para permitir que el esmalte se endurezca nuevamente.
- Utilizá geles con ingredientes protectores. Algunos de estos productos contienen ingredientes que pueden ayudar a proteger la salud dental, como el xilitol. Estos sustitutos del azúcar no son fermentables por las bacterias orales y, por lo tanto, no contribuyen a la formación de ácidos que erosionan el esmalte dental.
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