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Canto a la vida

“…Gracias a la vida que me ha dado tanto,
me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.
Gracias a la vida que me ha dado tanto,
me dio el corazón que agita su marco…”
Violeta Parra
Hay personas que pasan por el mundo para dejar un legado.
En el caso del running, trotan dejando una huella para que luego, los que quieran, puedan transitarla para seguir un ejemplo de vida.
Ese es el caso de Elisa Forti, la “nona” del running y del trail running que empezó en la disciplina a los 72 años y no paró más, a tal punto que ya participó de innumerables competencias, incluido el famoso y prestigioso El Cruce, el trail de 100K que se realiza en tres etapas en la Patagonia.
Sin proponérselo, gracias a su paso lento, pero constante, esta heroína de la vida se transformó en una referente del deporte, que la llevó a correr por todo el país (los organizadores se desviven por invitarla) e incluso a dar charlas motivacionales tanto a jóvenes como mayores.
A donde va, esta deportista de toda la vida, mamá de cinco hijos (con 11 nietos y tres bisnietos), es noticia: los medios la entrevistan para que cuente su ejemplo que, sin duda, sirve de inspiración.
Elisa está de visita en nuestra provincia porque el domingo participará en la famosa y mítica Media Maratón Canota Villavicencio, organizada por A.Ma.Vet. (Asociación de Maratonistas Veteranos), ONG que la invitó y que para ello contó con el apoyo de la empresa de medición de tiempos de carreras TYR.
Mendoza Corre tuvo el gusto y el honor de entrevistar esta mañana a esta italiana oriunda de Como, argentina por adopción, residente en provincia de Buenos Aires (partido de Vicente López). Un café en una confitería céntrica fue el escenario de una charla amena, donde no faltaron graciosas anécdotas, para que transmitiera su ejemplo desde su sabiduría y desde la paz de sus ojos celestes como el cielo.

Elisa corriendo el Raid de Los Andes, en el Norte del país.
El deporte como generador de felicidad
Como toda persona con grandeza, Elisa cultiva el don de la humildad, al decir que ella no es quien para dar consejos, no obstante lo cual con sus palabras, sin proponérselo, da un gran mensaje de vida que inspira hasta al más depresivo.
“Yo puedo dar el ejemplo de mi vida que fue muy plena. Siempre hice deportes. A los 15 años empecé con el vóley. Me casé, tuve cinco hijos y seguí jugando. Mis hijos se dedicaron al deporte y tuvieron una vida feliz”, comenta con su acento italiano que aún mantiene a pesar de vivir en Argentina desde muy joven.
Café de por medio, nuestra heroína continúa su fascinante relato subrayando que siempre sintió “placer gracias al deporte” y detalla cómo lo vive a los 83 años describiendo sus actividades diarias.
“Me levanto a la mañana  a eso de las 7 –relata con pasión–; desayuno bien (eso es sagrado), me pongo las zapatillas y me voy al río de Vicente López a trotar una hora al lado del agua, disfrutando de los árboles y jugando con los pájaros: viste que los tordos caminan delante tuyo… Eso me renueva mucho la parte mental. Te da una fortaleza interior, no sólo física, porque, aún lloviendo, salís a correr ¡y te sentís tan bien!”
Elisa es una runner de ley que complementa sus trotes diarios, consistentes en 10K por jornada, con tres días semanales de ejercicios de elongación y de propiocepción (noción del cuerpo en el espacio), que realiza en el consultorio de su hija menor que es kinesióloga.
Asimismo, los sábados, luego del running, se va al club a jugar un partido de dobles de tenis; cosa que también suele hacer los domingos.
Además, es una persona total y absolutamente independiente que vive sola y que no permite que sus hijos o nietos estén pendiente de ella, por lo que luego de sus entrenamientos se dedica a los quehaceres de su hogar, que incluyen una hora de costura. En este sentido, dice que la “relaja coser, mientras miro en la TV la RAI (canal estatal italiano)”.

Elisa es una fuente de energía y alegría. La entrevista con Mendoza Corre discurrió en un clima distendido a pura sonrisas. Foto: Guillermo Moreno.
Sentir el amor de los demás
Con su ejemplo de vida plena, Elisa es una fuente de inspiración por lo que es invitada constantemente a todo tipo de carreras e incluso a dar charlas motivacionales, tanto a jóvenes como a mayores.
Este año ha corrido en, entre otros lugares, Ushuaia, Choele Choel, Rosario, Capilla del Monte, Uritorco. “El mes que viene voy a San Juan y en diciembre trataré de correr El Cruce”, agrega entusiasmada y también detalla que ha dado charlas para mayores, a través del ANSES y en centros de jubilados, y también para jóvenes en establecimientos educativos primarios y secundarios.
Al respecto, con mucho orgullo expresa que “ahora, de grande, tengo la satisfacción de una vida tan llena, tan reconocida, sintiéndome tan querida, tanto por los jóvenes como por los mayores. Jamás pensé vivir esto a esta edad.”

A donde vaya, Elisa recibe el amor de sus admiradores.
Nada la detiene
Cuando dice “tratar” de correr en diciembre El Cruce es porque con humor relata que hace poco “tropecé con una raíz que ‘no me pidió permiso’, me caí y me lastimé una rodilla. Así que –dice apesadumbrada– vengo a Mendoza a caminar hasta donde pueda. Lo siento mucho porque me hubiera gustado participar plena” en la Media Maratón Canota Villavicencio.
No obstante deja bien claro que a El Cruce irá de todas formas, “aunque sea para participar de una etapa o para acompañar a los chicos”.

Elisa corrió cuatro veces El Cruce y este año irá por su quinto.
Sentirse querida gracias al running
Elisa destaca que el running le dio “una forma de vivir, de estar en compañía de gente joven que me acepta, de sentirme muy querida. Nunca pensé que corriendo podía ayudar a alguien. Y ahora con el cariño que me demuestran… Repito: jamás pensé vivir tan intensamente, de ver las lágrimas en los ojos de mis nietos e hijos cuando hablan de mí. Con mi nieta corrí en el Castillo de Windsor en Londres (25K de aventura entre bosques)”.

Elisa corre siempre acompañada por el amor de sus seres queridos.
Optimista del trote
Elisa predica que todo se puede y que todos pueden hacer lo que se propongan. Al respecto expresa que “antes de decir que no, yo les digo que prueben porque el timbre en tu casa no toca muchas veces… Probá, no te quedes con las ganas. Y no lo digo solo por correr sino para todas las cosas de la vida: si se te cruza una piedra intentá saltarla: por ahí caés, pero también la podés superar. No te quedes con la duda”.

Correr con placer

Para despedirse, le consultamos a la “nona del running” que dejara un mensaje a los jóvenes runners y, sin dudarlo, transmite: “Todo lo que hagan tienen que hacerlo con placer; sin mirar el reloj y sin volverse locos por dos minutos menos que puedan hacer para ganar.  Eso es para pocos. Hay que gozar el deporte, sentir placer. Es donde el deporte entra en tu mente y te llena”.

Elisa junto al presidente de A.Ma.Vet., Guillermo Moreno (izquierda) y al responsable de esta nota.

Fotos: Facebook, gentileza Elisa Forti (salvo las que digan que tengan crédito)
Facebook: Fan Page Mendoza Corre (clikc acá para acceder)
Twitter: @mendozacorreok (click  acá para acceder)

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Claudio Pereyra Moos

Periodista por pasión, más que por profesión. Ultramaratonista de montaña que corre tras ideales: traspasar metas de carreras difíciles, trabajar por una sociedad más justa, viajar para conocer nuevos horizontes.
2 Comments
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Unknown
5 years ago

Genia total!!! Yo con 54 comencé a correr!! Aveces aparecen problemas físicos o dolores!! Me encantaría que seres como ella estén en la Mesa de Mirtha Legrand! Felicitaciones y a seguir corriendo!!!

nicoivan002
5 years ago

Un venía está hermosa mujer.. totalmente inspirador todo lo que hace,y con tanta humildad..el mundo necesita éste tipo de gente y de ejemplos!!!