Cristian Malgioglio y Adela Barrios siguen entrenando muy fuerte a pesar de la pandemia del COVID-19 y se han fijado objetivos deportivos claros y precisos para el momento en que se levante la cuarentena.
No niegan que el encierro obligatorio les cambió radicalmente la vida e influyó en su preparación física, que venía muy aceitada, pero, como buenos atletas, han sacado un lado positivo.
Mendoza Corre mantuvo un enriquecedor diálogo con el «Mostro». Como no podía ser de otra forma en estos tiempos, la charla fue vía WhatsApp. Respondió desde su casa en Punta de Agua, un pueblito sito en suelo sanrafaelino a 80 kilómetros de General Alvear, que Cristian describe “atravesado por arroyos de montaña y muy verde…” y que siente, con Adela, es “nuestro lugar en el mundo”.
La entrevista
– ¿Cómo impactó la pandemia en ustedes?
– No podemos negar que la pandemia, con su cuarentena correspondiente, no fue una noticia agradable. Recuerdo que fue muy frustrante porque estuvimos entrenando muchos meses para la Media Maratón de Mendoza y dos días antes se canceló el evento. Para peor, esa iba a ser la primera competencia del año, luego de un largo y arduo verano entrenando, donde el proceso había sido muy bueno y nos hacía muchas ilusiones en cuanto a los resultados que podríamos obtener en dicha competencia. Con la cuarentena vino el encierro obligatorio y creo que, en principio, no fuimos todo lo conscientes de cuán larga sería esta situación, pensábamos que duraría no más de un mes a lo sumo. Con el transcurrir de las semanas empezamos a darnos cuenta de la magnitud real del problema y, bueno, ese fue el momento más crítico, donde tuvimos que asumir que por un largo tiempo nuestras vidas y objetivos se verían alterados. Por ende, es indudable que es una situación sumamente incómoda y preocupante en muchos aspectos.
– ¿Cómo sobrellevan la pandemia?
– La verdad es que bastante bien. A la frustración del primer momento le siguió otro de reflexión y la conclusión fue: «No puedo elegir entre hacer o no la cuarentena ya que es obligatoria, pero sí puedo elegir cuál será mi actitud ante ella». Y bueno, elegimos que nuestra actitud sería decidida, positiva y valiente. Nos propusimos y seguimos con la misma consigna: entrenar absolutamente todos los días, en nuestro caso doble turno cada uno y que se entrenaría con ganas o sin ella. Otro objetivo es mantenernos delgados, con unos buenos niveles de fuerza y una base aeróbica respetable. He decidido vivir esta situación como si fuera un desafío a mi voluntad y a mi disciplina. Cada día, luego de entrenar, me digo: “Qué mal te veo cuarentena vas perdiendo conmigo por goleada”. Ja, ja, ja. Es una forma de motivarme y mantenerme positivo.
– ¿Cómo entrenan?
– Nosotros entrenamos todos los días y en doble turno como lo veníamos haciendo. Este proceder tiene varias ventajas, a mi criterio: te mantiene gran parte del día ocupado y activo, sin dar tiempo a que la inercia del reposo se instale en uno y te gane la pulseada.
Por la mañana un circuito intenso de una hora de duración, más trote en espacio reducido y por la tarde se corre, nuevamente en un espacio reducido, entre 10 y 15 kilómetros, terminando la jornada con entrenamiento del Core y estiramientos. Insisto en esto: «Creo que mantenerse ocupado y en movimiento es vital para sobrellevar el encierro».
– ¿Esta situación ha impactado negativamente en sus preparaciones?
– Según como uno lo quiera ver. Si bien debo ser honesto y es que si me dieran a elegir, sin lugar a dudas no elegiría lo que hoy vivimos, creo que de este trance saldremos fortalecidos en muchos aspectos: en voluntad, en disciplina, en creatividad, en pasión por lo que hacemos.
Saldremos más agradecidos de todas aquellas cosas, personas y situaciones, que por tenerlas todos los días al alcance de la mano, no supimos valorar en su justa medida.
Luego manteniéndose en movimiento cada día en nuestras casas, la forma se recupera rápidamente.
Te resumo mi postura ante este momento difícil que vivimos: «no hay fracaso si hay aprendizaje».
– ¿Qué planes tenías para este año y cómo se han visto modificados?
– Los planes para este año eran muchos y ambiciosos, dentro de nuestras capacidades.
Para Adela Barrios, procurar mejorar su mejor marca de maratón, de dos horas 47 minutos 51 segundos (actual récord mendocino femenino de maratón, realizado en el año 2019, en el Maratón de Buenos Aires). Intentar lograr quedarse con el récord mendocino femenino de Media Maratón, aún en poder de Carina Allay. Y por qué no, volver, en lo posible, a ganar la MIM, donde también ostenta el récord de la carrera.
En mi caso, era intentar conseguir mi cuarto título de Campeón Argentino Absoluto de 100km en carretera; mejorar mi marca en 6 horas en pista (actual 77 kilómetros, 270 metros). Y debutar en las 12 horas de Termas de Río Hondo (Santiago del Estero).
Es obvio que muchos de estos planes se verán afectados por la pandemia, sino todos. Es una situación en la cual no tenemos influencia alguna, en lo que al devenir de la misma se refiere, por lo tanto debemos atenernos a aquellos aspectos, que sí dependen de nuestra conducta. Por el momento, lo único que depende de nosotros, y podemos elegir, es entre estar sentados en el sillón, o movernos y entrenar en nuestras casas de la mejor manera.
–En el hipotético caso de que se realicen algunas competencias, una vez finalizada la cuarentena, ¿cuáles serían?
– Creo que todo va a depender del tiempo que exista entre el final de la cuarentena y las fechas de las hipotéticas competencias. Pues para las pruebas de largo aliento se requiere de un tiempo prudente de preparación, no sería lo más aconsejable luego de no entrenar de la mejor manera, lanzarse a correr carreras de larga distancia rápidamente.
En nuestro caso, de existir un tiempo razonable para entrenar específicamente, para correr distancias largas, y luego de los tests correspondientes en entrenamiento, y que los mismos arrojen tiempos y datos decentes, optaríamos en el caso de Adela por correr una buena media maratón y en mi caso alguna ultra de carretera.
La despedida
El reportaje va terminando y el «mostro» no puede dejar de despedirse sin hacernos pensar y tira su «mensaje final para todos los runners de Mendoza por medio de esta magnífica frase de Bertolt Brecht: ‘hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay hombres que luchan muchos años y son mejores. Pero están los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles'».
Fotos: gentileza Cristian Malgioglio y Adela Barrios
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