Hoy abordaremos con Cecilia Fernández (*), la podóloga del Mendoza Corre, una de las dolencias más molestas para los pies de los runners: los popularmente denominados hongos.
La profesional sostiene que es importantísima la prevención de la micosis porque si no se trata adecuadamente puede derivar en consecuencias más serias para la salud de los pies.
Asimismo, Fernández advierte que es fundamental, ante los primeros síntomas, consultar a un podólogo matriculado porque muchas veces se confunde la micosis con otras patologías que hacen perder el tiempo al atleta con automedicaciones que pueden acarrear consecuencias no deseadas.
A continuación, una completísima e interesantísima entrevista que te despejará todas las dudas.
-¿Cuándo se presenta la micosis en los pies del runner?
-Grosso modo, hay dos tipos de micosis superficiales que se presentan en los runners: la ónicomicosis, que afecta a las uñas, y la tiña pedis, que afecta a la piel.
Tenemos dos tipos de ónicomicosis. Por un lado, la distal lateral, que es la más frecuente y cursa con engrosamiento de la uña y se pone color amarillo, marrón, gris o negro y suele comenzar por el borde de la uña. Por el otro, la blanca superficial, que es menos frecuente y se presenta como una mancha blanca en el dorso de la uña.
En cuanto a la tiña pedis, conocida como pie de atleta también, se da de tres formas básicas que pueden, o no, combinarse entre sí. Tenemos la escamosa, donde la zona afectada presenta escamas, engrosamiento y posiblemente picazón. Después está la ampollosa, donde se generan pequeñas vesículas de líquido. Por último tenemos la calcetín, que es cuando vemos una planta del pie eritematosa, extendiéndose hasta el borde lateral «como si fuera un calcetín».
En principio, es importante saber que el hongo es un microorganismo, es decir un ser vivo que para poder infectar nuestros pies se necesitan distintos factores, a saber:
1- Puerta de entrada, ya que la piel es una potente barrera de defensa, ésta debe sufrir algún tipo de lesión, maceración o apertura para que ingresen los microorganismos.
2- Producida la «puerta de entrada» deben estar los microorganismos presentes en la zona y en cantidad suficiente para poder producir la infección.
3- El huésped debe ser susceptible, esto quiere decir que atravesada la primer barrera de defensa, el sistema inmune no detecte el ingreso de los microorganismos y así los elimine (sucede cuando se produce lo que se conoce como «baja de defensas»).
4- Como cualquier ser vivo, necesita el medio para vivir y reproducirse. En el caso de los hongos es oscuridad, calor y humedad.
-¿Cómo debe controlar el atleta sus pies para advertir que sufre micosis?
–Es importante el control diario de la piel entre los dedos: que no se presente macerada, figurada. La planta del pie debe lucir homogénea, evitar la resequedad tanto como el exceso de humedad.
Las mujeres, entre esmaltados, deberían dejar pasar al menos siete días para poder comprobar el estado de las uñas, que no sufran ningún cambio de color o textura.
-¿Qué debe hacerse ante los síntomas de la micosis?
-Las micosis superficiales en el pie deben ser diagnosticadas y tratadas por un podólogo matriculado, que es quien va a saber el tipo de infección que es, conoce la farmacopea y farmacocinética apropiada de acuerdo a la clínica del paciente y los cuidados profilácticos tanto para el paciente como para la familia, ya que suelen ser afecciones contagiosas.
-Explicaste que se suele confundir la micosis con el efecto «uña engrosada» ¿Cómo diferenciarlas?
-Debido al exceso de publicidad de algún producto para la ónicomicosis llegan al consultorio pacientes «automedicados» para los hongos de las uñas y que tras años de tratamiento sin éxito buscan alternativas… Y cuando realizamos la evaluación la «supuesta ónicomicosis» resulta ser distrofia ungueal u onicodistrofia. Esta alteración en las uñas es muy común en los corredores debido a los miles de microtraumatismos que sufre la uña durante un entrenamiento; o por la elección de un calzado de puntera dura o puntera muy baja; o por hiperextensión del primer dedo… Hay muchas causas. Con el paso del tiempo se refleja en una “uña gruesa”, o que crece para un costado con líneas transversales, o que se levanta como un cuerno, etc. A estas alteraciones de la placa se la conoce con un término global que es onicodistrofia para luego desglosar en otros términos más específicos según las características.
Lo importante en este punto es que “el autodiagnóstico” suele costar caro, ya que no todas las uñas engrosadas tienen ónicomicosis.
-¿Qué hay que hacer para combatir esta dolencia?
-El primer paso es la prevención. No se conoce mejor tratamiento.
Las principales medidas profilácticas son el uso de medias transpirables o con sistema dry fit; evitar el uso excesivo de talco; ventilar las zapatillas luego de cada entrenamiento; no compartir calzado y elementos de higiene personal; evitar caminar descalzo por baños, natatorios, espacios comunes con otra persona que pudiera estar infectada.
Una vez que los síntomas están instalados, lo primero es consultar al profesional ya que no siempre es necesario recurrir a la farmacopea y es posible que mejore la clínica con cambios de hábitos o el uso de preparados naturales.
(*) Cecilia Fernández es podóloga con título universitario (matrícula 309). Entre sus principales antecedentes, es docente de la cátedra de «Ortopodología» de la Universidad Maza, donde también estuvo a cargo de la cátedra «Podología Deportiva”. En su currículum también figura ser docente de «Prácticas Profesionalizantes» del I.E.S. 9021 y ser actualmente la responsable del consultorio Podología Integral Cuyo sito en San Juan de Dios 140, esquina Florida, de Dorrego.
Foto Tapa: archivo Claudio Pereyra Moos
Fotos: gentileza Cecilia Fernández
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