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¿Qué hacemos? ¿Qué hicimos?

Ayer la comunidad runner mendocina se vio sacudida porque un grupo de siete corredores fueron asaltados en las inmediaciones de los cerros La Gloria y Llorón, poco después de las 14 horas.

Los infortunados deportistas fueron despojados de sus pertenencias personales, armas en mano, por dos jóvenes, uno de los cuales efectuó un disparo con una “tumbera” que hirió levemente a una de las víctimas.
Ésta última la sacó fácil de milagro ya que el impacto de los perdigones fueron amortiguados por las llaves de su auto que llevaba encima y que, afortunadamente, no fueron sustraídas.
Lo llamativo y trágico del caso es que los delincuentes efectuaron el disparo a quemarropa y cuando ya tenían consigo su botín y las víctimas se retiraban.
Una locura.
Bajada del cerro Llorón, cerca de esta zona es donde ocurrió el asalto de ayer. Da escalofrío pensar que más de una vez paseamos con nuestros hijos por acá.
¿Qué hacemos?
“Vamos a terminar corriendo solamente alrededor del lago”, dijo ayer un reconocido abogado runner luego de enterarse de la triste noticia y comentar impotente que ya no sabe qué hacer para entrenar con un mínimo de tranquilidad en nuestro Parque San Martín y alrededores: él se dedica al trail running y le gusta, cada tanto, entrenar potencia en las piernas en la zona del asalto.
El concepto que plantea el letrado nos lleva a la pregunta inevitable que nos hacemos todos los amantes del trote y del deporte al aire libre y que queremos disfrutar de nuestro principal pulmón verde: ¿qué hacemos?; para luego hacernos otros interrogantes: ¿nos quedamos en casa? ¿Solamente corremos alrededor del lago? ¿Gritamos de bronca? ¿Nos resignamos? ¿Reclamamos?
¿Qué hacemos?
Por lo pronto, lo que se nos  ocurre es que con la legítima bronca que tenemos no debemos resignarnos porque el espacio público no es de los delincuentes.
Gritar sirve inicialmente para hacer catarsis, aunque luego debe venir el reclamo conducente a los efectos de, aunque sea, disminuir el terrible flagelo de la inseguridad que nos azota desde mediados de la década de los ’90.
En este sentido, Mendoza Corre sostiene editorialmente que la lucha contra la inseguridad debe nacer desde la prevención social en las calles, que deben ser ganadas por el deporte y la cultura, aunque no debe faltar la acción represiva del delito (ver nota haciendo click acá).
Coordinar acciones
En las habituales salidas al trote que Mendoza Corre hace por nuestro Parque, ha podido observar la presencia policial en diferentes puntos como en la subida de los autos del cerro La Gloria (Policía Montada) y la avenida Ruiz Leal (la arteria del Cricyt); como así también móviles por diversas calles.
Evidentemente falta coordinar la acción policial con los actores deportivos del parque, como los equipos de running, para establecer las zonas y los horarios más aptos para la práctica deportiva y para optimizar el recurso humano de seguridad.
Otra acción que sin duda ayudará a mejorar la situación son los trabajos integrales que se harán en el Parque San Martín, que el gobernador Alfredo Cornejo anunció ayer y que incluyen, entre otras cosas, obras de infraestructura y cámaras de seguridad.
En cuanto a la acción de los deportistas, lo aconsejable es salir en grupo, lo más numeroso posible, y no llevar pertenencias llamativas que sean «cebo» para los delincuentes. También, cuando vamos a los cerros, hay que coordinar las salidas con la policía (dirigirnos al destacamento que está frente al Zoológico o llamar al 911).
Senderos sitos frente al Anfiteatro Frank Romero Day, que son frecuentados por miles de runners para practicar técnicas de trote en montaña.
 
¿Qué hicimos?
Cada vez que ocurre un hecho desgraciado como el de ayer, otra pregunta inevitable que nos formulamos es ¿qué hicimos?
Qué hicimos como sociedad para vivir esta terrible realidad donde la inseguridad está naturalizada.
Al hablar de este flagelo salta a la palestra el debate de los fenómenos lamentables que padecemos en la sociedad como la falta de apego a las normas, las culturas del “sé gual” y del facilismo, el enseñoramiento de la violencia…
Todos estos factores son reales y ciertos, que deben ser modificados a partir del reestablecimiento de la autoridad (no autoritarismo) y de la mejora de la educación.
Pero también debemos analizar qué hicimos para tener un país con un 30% de pobreza cuando a mediados de los ’70 teníamos sólo un 5%. Y además preguntarnos cómo puede ser que teniendo recursos para alimentar a 400 millones de personas, y siendo 40 millones de habitantes, en Argentina haya gente que pase hambre y niños mal nutridos.
Mientras no solucionemos este tema de fondo (que llevará tiempo por cierto), la inseguridad seguirá estando presente.
«Rompepiernas» o ascenso peatonal del cerro La Gloria, sito al lado del Zoológico
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Twitter: @mendozacorreok (click  acá para acceder)

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Claudio Pereyra Moos

Periodista por pasión, más que por profesión. Ultramaratonista de montaña que corre tras ideales: traspasar metas de carreras difíciles, trabajar por una sociedad más justa, viajar para conocer nuevos horizontes.
3 Comments
Comentarios en línea
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Juan Pablo Richard
8 years ago

Igual , como paso en chacras, no hay q abandonar el lugar y exigir a las autoridades mayor presencia en la zona , con la movilidad q corresponda a la topogafria( bicis mtb, caballos, motos enduro etc). Si no exigimos , de a poco vamos perdiendo la libertad de circular por donde queremos y eso no hay q permitirlo.

Lucia Perez Nuñez
8 years ago

Por sobre todas las cosas, es fundamental darle un aprovechamiento adecuado a los pocos recursos con que cuenta nuestra policia provincial. Esto viene a colación, de que hace exactamente una semana, en una zona aledaña a donde ocurrió el asalto, todo nuestro grupo fue escoltado por un patrullero durante 40', solo para defender intereses de un gran ladrón empresario. Se persigue al deportista y se lo desampara, cuando se desvía completamente la mirada y se ignora tanto.

Lucia Perez Nuñez
8 years ago

Por sobre todas las cosas, es fundamental darle un aprovechamiento adecuado a los pocos recursos con que cuenta nuestra policia provincial. Esto viene a colación, de que hace exactamente una semana, en una zona aledaña a donde ocurrió el asalto, todo nuestro grupo fue escoltado por un patrullero durante 40', solo para defender intereses de un gran ladrón empresario. Se persigue al deportista y se lo desampara, cuando se desvía completamente la mirada y se ignora tanto.