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Mañana de risas y emociones

¡Largaron!

Cerca de un centenar de niños protagonizaron esta mañana en el parque San Martín la segunda edición de Nutrisol Kids, la carrera solidaria que recaudó alimentos no perecederos para el comedor Shire del barrio La Favorita de Ciudad.

En el ambiente se sintió, por un lado, la positividad que irradiaban los «locos bajitos» y, por el otro, la emoción por el recuerdo del creador de esta iniciativa, el nutricionista Diego Guzmán, que el año pasado decidió partir físicamente de esta tierra.

Cómo líder del team de running Nutridos, en 2021, Diego concibió esta iniciativa. Como homenaje, sus alumnos decidieron que se siguiera disputando. Es que de esta manera sienten que su «profe» sigue con ellos.

Así las cosas, la atmósfera estuvo impregnada de sensaciones contradictorias porque a la alegría natural de los niños corriendo junto a sus papás se le contraponía la tristeza por el ser querido que ya no está.

A la hora de los discursos, Anabel Sánchez, una de las responsables del comedor Shire, no pudo contener las lágrimas al recordar a su amigo Diego, que el año pasado le propuso la Nutrisol Kids para recaudar alimentos no perecederos para los que necesitan una mano en el barrio La Favorita.

Cabe acotar que en esta edición, además de los ex integrantes de Nutridos, la cita deportiva contó con la colaboración del team Gustatrail Mendoza, conducido por Alejandro García.

Integrantes de Nutridos, el team que fundó Diego Guzmán.

Circuitos y desarrollo

Hubo dos propuestas, una de tres y otra de seis kilómetros.

Con epicentro en el Predio Gaucho, ambas alternativas discurrieron por las arterias más protegidas por la sombra de los árboles del principal pulmón verde mendocino, como las calles Camino del Medio, Los Abetos, Los Plátanos, Del Grifo o Ruiz Leal.

La mayoría de los niños corrieron acompañados por un mayor (padre, tío o algún ser querido) y dieron todo porque desplegaron al máximo su energía.

Al ser una carrera para chicos, no fue competitiva ya que se priorizó el aspecto lúdico, aunque cada participante que cruzó la línea de meta recibió como recompensa su medalla finisher y un certificado.

Como incentivo, los pibes contaban con el aliento y la guía de cuatro payasas que con sus ocurrencias lograron que la mañana fuese más divertida.

La carrera se realizó por las calles con más sombra del parque San Martín.

Postales de una jornada inolvidable

A continuación, algunas imágenes que ilustran la mañana especial que se vivió en el Parque San Martín:

¡Alegría! El chiquilín de la siguiente foto sintetiza las sonrisas que se derrocharon durante la Nutrisol Kids.

La alegría de correr…

De tal palo… Junto su mamá, Gisel Wabiszczewics, Luca Guzmán se hizo presente en el homenaje a su papá. Como no podía ser de otra manera, corrió con todo, siguiendo el ejemplo de Diego, que era un gran trail runner.

Gisel y Luca.

Terapia de risas. Cuatro hermosas y divertidas payasas guiaron a los niños durante toda la carrera. Además los alentaban y, si lo necesitaban, los ayudaban a terminar el largo y difícil recorrido.

Las payasas acompañadas por Tincho.

Alas de Esperanza presente. Tincho es integrante del team de running creado por Mario Arenas, hoy conducido por Cristian Amador y Cecilia Boschi. Con su buena onda participó de los 3 kilómetros.

Tincho, de Alas de Esperanza.

La profe y su hija. Gabriela Verna es la conductora del equipo femenino Women Up Training. Hoy no solamente estuvo presente en el Parque San Martín como docente de educación física sino también en el rol de madre ya que acompañó a su hermosa hija Helena Peralta.

La profe Gabriela y su hija Helena.

Tío y futuro papá. El trail runner Jesús Cifuentes trotó junto a sus sobrinos Isaias y Valentina. De esta manera se prepara para, dentro de poco, desempeñar su papel de progenitor ya que su pareja, Andrea López, cursa el quinto mes de embarazo. Ambos esperan a Eva María.

Jesús con sus sobrinos.

Loable tarea. La carrera estuvo muy bien señalizada ya que no faltaron los banderilleros que guiaron a los locos bajitos para que no se perdieran y trotaran seguros.

Los banderilleros guiaron a los chicos.

Guías. Como dijimos, las payasas no solamente hicieron reír a los niños sino que también los alentaron a lo largo de los circuitos, tal como lo atestigua la siguiente instantánea.

La payasa guía al runner.

Al reparo de los árboles. La carrera se desarrolló por las calles del parque San Martín que más sombras ofrecen para que los niños no sintieran tanto el esfuerzo.

Correr en el parque San Martín al amparo de sus árboles es maravilloso.

Fotos: Claudio Pereyra Moos
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Claudio Pereyra Moos

Periodista por pasión, más que por profesión. Ultramaratonista de montaña que corre tras ideales: traspasar metas de carreras difíciles, trabajar por una sociedad más justa, viajar para conocer nuevos horizontes.