Limpiar al trote

Gustavo, Joaquín, Mario, Edgardo, Alejandro y Lysiane se guiaron por el concepto de la misionera católica para juntarse y limpiar al trote los cerros de nuestro Parque General San Martín, para contrarrestar la desaprensión de miles de maleducados que arrojan residuos de todo tipo.Estos soñadores con un pequeño gesto demostraron el gran amor que tienen por la naturaleza.

Con su acción, el grupo de trailrunners (corredores de montaña) persiguen enviar un mensaje de concientización a una sociedad que perdió el hábito del respeto hacia el medioambiente.

El ideólogo de los Limpiatrails, Gustavo Gómez, junto a su hijo Joaquín, que participó de la movida ecológica.

La idea original partió de Gustavo Gómez, un kinesiólogo andinista y corredor de montaña que, trotando un día por la zona del cerro de La Gloria y adyacencias, se preguntó “por qué no vengo con una bolsa a limpiar” los residuos que arrojaron los miles de visitantes a la Fiesta Nacional de la Vendimia que se llevó a cabo recientemente.

Así las cosas, transmitió la idea a varios amigos trail runners, valiéndose de un grupo de WhatsApp donde había visto un video en el que corredores de Estocolmo practicaban el “plogging”, un término que nace de conjugar la palabra sueca plocka (recolectar) con la inglesa jogging (trotar).

La idea prendió, aunque rebautizaron la iniciativa como “limpiatrails”, conjugando el español limpiar con el inglés trail, porque ellos son trailrunners, o corredores de montaña.

Así las cosas, los flamantes “limpiatrails” dejaron las expresiones de deseos por la acción: el sábado pasado se juntaron a las 10 de la mañana en la puerta del Ecoparque (antiguo Zoo), para limpiar, al trote, el cerro de La Gloria y adyacencias.

Mario «Indio» Ramírez y Lysiane Blay se encargaron de limpiar los costados de la subida de los autos del Cerro La Gloria.

Buena recepción

Acudieron a la cita limpiatrail, además de Gustavo, su pequeño vástago Joaquín, Mario Edgardo Arenas, Mario “Indio” Ramírez, Alejandro Verzini y la guía de montaña francesa Lysiane Blay.

“Fuimos pocos porque no tuvimos el tiempo suficiente para convocar a través de las redes sociales, pero la iniciativa tuvo muy buena recepción en los transeúntes ya que nos miraban y nos alentaban, e inclusive otros nos acompañaban”, puntualizó Gustavo.

Al respecto, contó el caso de unas señoras que empezaron a recolectar basura con ellos, al igual que un grupo de bikers. Inclusive charlaron con el preparador físico de las inferiores de fútbol de Gimnasia y Esgrima, que estaba dirigiendo un entrenamiento y estaría dispuesto a sumarse con sus jugadores.

¡Limpieza al trote!

El trail runner explicó que la idea original era limpiar el cerro de La Gloria y sus adyacencias, cerro Llorón y alrededores del Anfiteatro Frank Romero Day incluidos, porque toda esa zona fue muy maltratada por los visitantes de la Fiesta Nacional de la Vendimia.

Sin embargo, se encontraron con tanta mugre que sólo pudieron trabajar los costados de las subidas del cerro La Gloria (la de los autos y la del “rompepiernas” -el caminito hormigonado que está al costado del Zoo-) y la “bajada de los pinos” (el sendero forestal del lado opuesto que desemboca al Anfiteatro).

Durante dos horas de trote y recolección de residuos, los limpiatrails juntaron nada más y nada menos que 20 bolsas de consorcio con basura, que depositaron en los recolectores que la Administración de Parques dispone en nuestro principal pulmón verde y que muy pocos usan.

Gustavo detalló que el 90% de lo recolectado son residuos plásticos, especialmente botellas, que los arrojan entre los arbustos de los costados de los caminos. “Algunos son más ‘educados’ y colocan la basura en bolsas y a los costados de la ruta, en vez de hacerlo en los recolectores”, expresó con ironía el deportista.

Gustavo Gómez contó a Mendoza Corre que su idea es que los “limpiatrails” actúen una vez al mes.

La próxima convocatoria será con más tiempo para conseguir más adherentes y así dar un mensaje concientizador más contundente.

Habrá que estar atentos a las redes sociales para la próxima movida.


En primera persona

Los que pertenecemos al mundo runner sabemos tirarnos chanzas entre nosotros diciéndonos que estamos “locos”.

Y muchas veces no nos cabe otro calificativo, si tenemos en cuenta que nos las vemos en figurillas para conjugar entrenamiento con las obligaciones laborales y familiares.

Todo por la locura de volver a ser niños y experimentar la felicidad que da el correr al aire libre…

¿No estamos locos cuando corremos una maratón o ultramaratón y seguimos aún a pesar de que el cuerpo no da más? ¿O cuando, guiados por el dolor físico, recurrimos a la mística para soñar que nos espera en la meta un ser querido y así poder terminar una carrera difícil?

El antídoto ante tanta locura, a veces, lo encontramos en una locura aún mayor: soñar con ideales por un mundo mejor, que los imaginamos durante horas y horas de entrenamiento.

Uno de estos ideales fue llevado a la práctica el sábado pasado por los limpiatrails.

Esos locos que corren…Fotos: gentileza Mario Edgardo Arenas